El gusano Sasser, diseñado para atacar al sistema operativo Windows, infectó a ordenadores de todo el mundo, haciendo que se bloqueasen y se reiniciasen. Cuando apareció el gusano en mayo de 2004, Microsoft actuó rápidamente para ayudar a los clientes a protegerse. A las 48 horas de la aparición del gusano, Microsoft proporcionó gratuitamente una herramienta de limpieza que, de forma automática, eliminaba Sasser de los ordenadores infectados.
Sin embargo, a pesar de esto, Sasser se convirtió en un código malicioso muy destructivo y de alcance mundial. A partir de ese momento, Microsoft colaboró con las autoridades, compartiendo información que condujo a un arresto en el caso. El autor del gusano fue arrestado por la policía alemana a los siete días de la aparición de Sasser.
La recompensa se pagará a través del programa de recompensa antivirus de Microsoft, una iniciativa que la compañía puso en marcha en noviembre de 2003, junto con la Interpol, la Agencia Federal de Investigación y los Servicios Secretos de los Estados Unidos, para ofrecer un incentivo a quienes a ayudasen a identificar a aquellos responsables de lanzar virus y gusanos maliciosos en Internet y disuadir a los criminales. La recompensa se paga a los informantes que no están involucrados en la actividad criminal y proporcionan información fiable a las autoridades que conduce a un arresto y una condena.