Los internautas podrían tener que pagar por cada e-mail que envíen si prosperan las propuestas de Microsoft y otras compañías que proponen sellos informáticos para frenar la plaga del engorroso correo electrónico basura o spam. Los costes derivados del envío de millones de correos electrónicos con publicidad sobre productos milagrosos, acceder a contenidos pornográficos o con exclusivas recetas para hacerse millonario en cuatro días son ridículamente bajos.
Este es el motivo, alegan Microsoft y otras empresas, de que los buzones estén abarrotados con publicidad no deseada y, en la mayor parte de los casos, inservible. Microsoft propone un sello informático, que pondría un precio a cada mensaje electrónico que se envíe, al igual que ocurre con las cartas de correo tradicional.
El 50% de los mensajes
En opinión de Bill Gates, fundador de Microsoft, ésta es la solución contra esta plaga, que ya supone la mitad o las tres cuartas partes (la cantidad varía dependiendo de los expertos a quien se consulte) de todo el correo electrónico que se envía.
La UE pide una ley más estricta
La UE apostó ayer por aumentar la colaboración entre autoridades, empresas y usuarios ante la proliferación de spam, al tiempo que abogó por una aplicación estricta de la legislación en la materia, que restringe el envío de este tipo de mensajes salvo autorización previa del receptor.