“En cualquier parte del mundo, los clientes merecen tener la libertad de escoger y el poder de disfrutar de los beneficios de la innovación, capacidades que les han sido arrebatadas dentro del mercado de los microprocesadores,” dijo Héctor Ruiz, Presidente de la Junta Directiva, Presidente y CEO de AMD. “Ya sea a través de precios altos ocasionados por el monopolio, menos opciones a escoger dentro del mercado, o las barreras impuestas a la innovación, gente desde Osaka hasta Frankfurt y Chicago paga diariamente el precio en efectivo de los abusos del monopolio creado por Intel.”
Los microprocesadores x86 ejecutan los diferentes sistemas operativos de Microsoft Windows®, Solaris y Linux. Inclusive Apple®, un pionero en la industria y uno de los más grandes y perdurables innovadores dentro del mundo de la tecnología, anunció que recurrirá únicamente a procesadores x86 para ejecutar su sistema operativo Mac OS® a partir de 2006. La participación de Intel dentro de este crítico mercado asciende al 80% de las ventas mundiales por unidad y 90% por ingresos, brindándole la posesión de un firme monopolio y un alto poder de dominación del mercado.
Este litigio sigue el reciente fallo de la Comisión de Prácticas de Comercio Justo de Japón (Fair Trade Commission of Japan –JTFC-), que encontró que Intel abusó de su poder de monopolio a fin de excluir la competencia leal y abierta, violando con ello la sección 3 del Japan’s Antimonopoly Act. Estos descubrimientos revelan que Intel incurrió deliberadamente en prácticas ilegales a fin de detener el crecimiento de la participación de mercado de AMD a través de la imposición de limitaciones a los fabricantes japoneses de ordenadores. Intel decidió no responder a las acusaciones.
La Comisión Europea ha declarado que está realizando una investigación en contra de Intel por posibles violaciones antimonopolio y se encuentra en estrecha cooperación con las autoridades Japonesas.