Google Maps es uno de los productos que más tirón tiene en móviles. La evolución parece lógica, dar un paso más y añadir el valor de la geolocalización. Las herramientas estaban ahí, en el móvil. Cada vez que realizamos una llamada nuestra señal se registra de alguna forma en los repetidores que nos suministran la cobertura, pues teniendo un mapa y un móvil con cobertura: listo, ya tenemos un sistema de localización sin GPS.
Esta es la tecnología que utiliza Google Maps para realizar las búsquedas. No es tan precisa como un GPS porque depende de la situación y ubicación de los repetidores-el error puede oscilar entre unos 500 metros del punto exacto hasta 5 kilómetros- pero sirve para ubicarnos, y más si tenemos en cuenta que sólo el 15% de los móviles tienen GPS.