Días después de los ataques sobre las torres World Trade Center y el Pentágono, un importante grupo de piratas cibernéticos europeos hizo una petición al resto de la comunidad de computación. “Nos enfrentamos a este poder de destrucción y nos sentimos desamparados. Sin embargo, creemos en el poder de la comunicación, un poder que siempre prevaleció hasta el final y que es más fuerza positiva que odio”.
Algunos expertos en seguridad temen que piratas malintencionados roben datos confidenciales o hagan algo peor. En Europa, el grupo de piratas Yihat proclamó haber penetrado en cuentas bancarias de Oriente Medio pertenecientes a Al Kaidah, la organización sospechosa de realizar los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos.
Incidentes de activismo informático, o protestas digitales con un mensaje político, se han producido durante mucho tiempo, como equivalentes cibenéticos de las campañas en los campus universitarios o el graffiti en las calles. Muchos de los ataques que se han ido produciendo últimamente son debidos a piratas jóvenes que querían llamar la atención. Algunos ataques de Pakistan y Afganistán a Estados Unidos reflejaron una ola de emociones patrióticas en Estados Unidos, pero la mayoría de ellos sólo estaban utilizando el nuevo conflicto internacional para obtener protagonismo.