El cibercrimen se adapta a las nuevas formas de acceso a internet de los usuarios. Los nuevos "ladrones virtuales" se llaman smartcriminals y han ido ganando popularidad al tiempo que los teléfonos móviles inteligentes han ido cobrando protagonismo en nuestras vidas. Según un estudio europeo realizado por Kaspersky Lab sobre hábitos y riesgos de los usuarios de móviles en Europa, España es el segundo país europeo en acceso a internet móvil (72%), sólo superado por Reino Unido, lo que nos posiciona como un candidato muy interesante para las redes de smartcrime. La prevención de ataques informáticos ya están integrados en el uso que hacemos de nuestros ordenadores, pero, según el citado informe, sólo un 12% de los usuarios en Europa tiene instalado un antivirus para su dispositivo móvil.
Hace unos años los virus para móviles no eran una amenaza real, pero hoy en día, Kaspersky Lab cuantifica crecimientos que arrojan cifras que hablan por sí solas: en 2010 se ha registrado un 65% más de programas maliciosos para móviles que en 2009 y casi el doble que 17 meses antes. En total se detectaron 153 familias y 1.063 modificaciones (2). Además, destaca que la gran mayoría de los programas maliciosos detectados por Kaspersky Lab durante el último año estaban, de una forma u otra, destinados a robar dinero a los usuarios.
En el mundo del malware móvil siguen predominando los programas que envían mensajes de texto a números premium. Pero desde 2010, el envío de SMS de pago ha dejado de ser el único método para el lucro. El año pasado, se detectó el primer troyano capaz de realizar llamadas a números de pago en el extranjero. También se descubrió un gusano para iPhone que remitía a una web falsa.