La propuesta es sencilla, la compañía Microsoft ofrece una recompensa de 14.000 dólares a quien sea capaz de hackear su nuevo navegador web Spartan. Así que el nuevo navegador, previsto para ser presentado en sociedad en verano, será el foco de atención los próximos meses.
Las condiciones son las siguientes: La compañía solo pagará si el usuario encuentra una brecha importante en el navegador y lo comunique de forma privada a Microsoft. También ha explicado que pagará 500 dólares a quien detecte brechas de seguridad de menor importancia.
También han explicado que se llevará el premio quien pueda ejecutar un código remoto y hacerse con el control del ordenador atacado a través de dicho navegador.
Con este reto, la compañía pretende demostrar la fortaleza de su nuevo navegador web, retando a los usuarios a intentar doblegarlo.