Desde que el pasado mes de julio saltasen todas las alarmas al descubrir el mayor fallo de seguridad jamás detectado en el sistema operativo de Google, ésta y Samsung se han asociado para velar por la seguridad de Android con actualizaciones mensuales para sus usuarios.
Las dos compañías han decidido ponerse manos a la obra para evitar que se repitan casos como el antes explicado programando un sistema de parches de seguridad mensual.
El jefe de seguridad de Android, Adrian Ludwig, declaró en la pasada conferencia de seguridad Black Hat, celebrada en Las Vegas: "Hemos entendido que tenemos que avanzar mucho más rápido y adelantarnos a los acontecimientos. Tenemos que velar por la seguridad de Android y de nuestros usuarios".
Por el momento Google trabaja en el desarrollo de un parche de seguridad para distribuirlo entre sus propios teléfonos Nexus con el objetivo de solucionar cuanto antes el bug de seguridad que los afecta.