Una de las realidades mas cruda a la que nos enfrentamos en estos momentos es la de la extinción de dominios inservibles o inutilizados por sus dueños. Aunque las características particulares del dominio «.es» hacen que atraviese una situación especialmente difícil, lo cierto es que, debido a la crisis general, decenas de miles de dominios son literalmente abandonados cada día por sus propietarios, que no pagan las tasas correspondientes para su mantenimiento. Cuando esto sucede, el dominio en cuestión es dejado en suspenso durante un corto periodo de tiempo. Si el propietario decide pagar antes de que termine este plazo, recupera su dominio. Si no es así, éste es destruido, borrado del registro general de dominios y vuelve a quedar, por lo tanto, disponible para cualquiera que quiera solicitarlo.
Un simple vistazo a www.deleteddomains.com, página que recoge, cada día, los dominios en suspenso y los destruidos, basta para darse cuenta de que el fenómeno es mucho más común de lo que parece. Así, el pasado lunes, día en que se registraron 28.553 nuevos dominios (los datos sólo se refieren a los «.com», «.net» y «.org»), 95.266 pasaron a la situación previa a su borrado (es decir, fueron abandonados por sus propietarios) y 10.609 fueron eliminados completamente al haberse cumplido el plazo para actualizar el pago de mantenimiento.
Actualmente existen en total 16.227.871 dominios destruidos y 852.006 en suspenso.