
Tim Cook, consejero delegado de Apple, ha respondido con una negativa a la petición realizada por el FBI de poder acceder a un iPhone supuestamente usado por uno de los autores del tiroteo de San Bernardino (California). También ha declarado que: "El gobierno de Estados Unidos nos ha pedido algo que simplemente no podemos y es algo que consideramos demasiado peligroso. Nos han pedido construir una puerta trasera para el iPhone"
En una carta dirigida a los clientes de la compañía, el máximo responsable de la firma ha asegurado que bajo ningún concepto construirá una "puerta trasera" para acceder a los datos personales de sus clientes.
Aseguran que han hecho todo lo legalmente posible para ayudar al FBI pero consideran que hay líneas que es peligroso cruzar.