
Google ha decidido ampliar los objetivos de su proyecto Fiber, iniciado en su momento para desplegar redes de alta velocidad. En esta ocasión, y después de 5 años de arrancar el proyecto, la compañía ha decidido poner en marcha un plan para llevar banda ancha inalámbrica directamente a los hogares de los usuarios.
Llevar a cabo este plan implica una fuerte sacudida en el mercado de la conexión a Internet ya que repercutiría directamente en la estructura de banda ancha tal y como la conocemos hoy. Google dispondría de su propia red nacional y rivalizaría directamente con los gigantes del sector tales como AT&T, o ComCast y si le añadimos la eliminación del factor logístico, instalación de cables físicos, liberarían a los usuarios de sus dependencias con los proveedores actuales de Internet.
El buscador no es el único interesado en este tipo de proyectos, Facebook ya se ha interesado en esta tecnología y ha presentado Terragraph y Project Aries.