Después de que el gigante tecnológico fuera investigado hace un año por posible actuación monopolística, la CE ha ampliado la acusación por presunto abuso de posición dominante al considerar que favorece de forma reiterada sus propios productos en Google Shopping en los resultados de las búsquedas.
La Comisión Europea ha hecho llegar a los responsables de Google la documentación donde se especifican las irregularidades por las cuales se acusa a la multinacional. La CE considera que existen evidencias adicionales y datos que probarían esta posición dominante.
Según la comisaria europea Margrethe Vestager, responsable de política de competencia, Google ha ofrecido "muchos productos innovadores que han sido fundamentales en nuestras vidas, pero esto no le da el derecho a denegar a otras compañías la oportunidad de competir e innovar".