Apple ha reconocido que está estudiando la batería de su último modelo iPhone 8. Después de que se publicaran en Twitter varios dispositivos con la batería hinchada, los de Cupertino han reconocido en TechCrunch que están trabajando en ello. En medios especializados declararon: “Lo sabemos, ło estamos mirando”.
El diseño de baterías es uno de los pasos más críticos en la fabricación de un móvil ya que no solo intervienen las exigencias de autonomía demandada por parte de los consumidores o el coste de dicha fabricación, sino, la peligrosidad de sus componentes si no están bien ensamblados y refrigerados.
Hace tan solo un año, la compañía Samsung retiró del mercado el Galaxy Note 7 después de detectar un defecto de fabricación que hacía que algunas de las baterías estallasen. Por el momento no se ha detectado ningún caso en el que las baterías del iPhone 8 prendan fuego, pero sí se han detectado deformaciones que afectan a la parte trasera del dispositivo.
El pasado 22 de septiembre el nuevo modelo de Apple salió a la venta en Estados Unidos y todavía es pronto para saber el alcance de este defecto que no parece afectar a una mayoría de dispositivos.
Se estima que muchos compradores no han renovado todavía sus modelos para adquirir el nuevo iPhone 8, cuyas reservas comienzan el 27 de octubre y sale a la venta el próximo 3 de noviembre. Este impaso de tiempo permitiría a la compañía resolver el posible defecto sin tener la presión de una gran demanda del nuevo modelo.
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