La compañía Apple pidió la semana pasada a sus clientes que retirasen algunos adaptadores de corriente alterna de tres clavijas vendidos en los mercados de Hong Kong, Singapur y Reino Unido debido a un riesgo de poder causar descargas eléctricas al tocarlos.
La compañía explicó en un comunicado que: "En algunos casos muy raros, los adaptadores afectados pueden romperse y crear un choque eléctrico si se tocan". Los adaptadores en cuestión, acompañaban los ordenadores Mac y algunos dispositivos con sistema operativo iOS. Fueron vendidos entre 2003 y 2010.
Apple confirmó que hasta la fecha se habían detectado seis incidentes en todo el mundo con este tipo de adaptadores. Aunque el programa de retirada es voluntario, la compañía aconseja a sus clientes que dejen de usar los adaptadores afectados y que se dirijan a la web de Apple para solicitar un cambio gratuito del mismo.
Concretamente estos adaptadores son blancos, de tres clavijas y no tienen letras en la parte inferior.