A partir de ahora, los jóvenes chinos solo tendrán una hora al día como mucho, sólo los viernes, sábados y domingos para jugar a videojuegos en la red. Este es el límite impuesto por una nueva y restrictiva norma del gobierno destinada a combatir la adicción a los juegos. Las autoridades, que han llegado a comparar los videojuegos como "opio para el espíritu" han declarado que "En respuesta al problema del uso excesivo, o incluso la adicción de los menores a los juegos en línea, se controlará estrictamente las medidas para proteger eficazmente la salud física y mental".
Según ha avanzado la agencia de noticias estatal Xinhua, el aviso se ha enviado a las compañías que gestionan los servidores de populares juegos en línea como Tencent o NetEase e incluso han señalado la única hora en la que los jóvenes podrán jugar. Será de 8 a 9 de la noche.
Hasta la fecha, el gobierno chino había impuesto una de las leyes más restrictivas para controlar el juego en línea de los menores. Los menores de 18 años sólo podían jugar una hora y media al día, casi todos los días de la semana. Además, aunque jugar estaba prohibido desde las 10 de la noche hasta las 8 de la mañana, los jugadores podían elegir en qué momento del día usaban esos 90 minutos.
A la vista de la situación, las plataformas de juego en red ya tienen sistemas implementados para el control del límite horario y exigen a los usuarios usar nombres reales para dar de alta las cuentas de juego y evitar burlar las normas.
La norma no afecta por el momento a juegos que no requieran de una conexión a Internet pero supone un duro golpe a títulos populares como Honor of Kings o Onmyoji, que cuentan con millones de jugadores en China.
Crear cuenta