La tecnológica Google ha informado a sus empleados de que, en caso de no vacunarse, podrían perder el sueldo, y llegado el momento, ser despedidos. Lo ha hecho a través de un documento enviado a sus más de 150.000 empleados en el que solicita que compartan su estado de vacunación mostrando pruebas.
La compañía ha explicado que aquellos empleados que no cumplan con las normas de vacunación de la empresa pasado el próximo 18 de enero recibirán una licencia administrativa pagada durante 30 días. Tras esto, pasarían a perder el sueldo durante los seis meses posteriores y una vez cumplido este tiempo, serían despedidos.
Los responsable de la compañía han asegurado que "Creemos firmemente que nuestros requisitos de vacunación son una de las formas más importantes de mantener la seguridad de nuestra plantilla y el funcionamiento de nuestros servicios. Nos comprometemos a hacer todo lo posible para ayudar a nuestros empleados a que puedan vacunarse". Añaden que "Cualquier persona que ingrese a un edificio de Google debe estar completamente vacunada o tener un alojamiento aprobado que le permita trabajar o venir a las instalaciones".
El plan de la compañía no ha sido aceptada de buen grado por parte de la plantilla. Algunos de sus trabajadores han firmado un manifiesto en el que se oponen a las nuevas directrices de la empresa.
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