Secunia informa en el resultado de su estudio que, en su mayoría implican la posibilidad de eludir las zonas de seguridad de Internet Explorer. Esto permite que sitios provistos de scripts especiales sean abiertos con derechos mucho más amplios que los normal. Así, los sitios considerados malignos pueden ejecutar código que les permita tener pleno acceso a las máquinas visitantes.
Estos agujeros ha sido probados única y exclusivamente en Internet Explorer 6.0 por lo que falta testear las demás versiones del explorador.