Stelor, con sede en Darnestown, Maryland, se opone a que se aplique la marca Google para una "larga lista de bienes y servicios, incluidos libros infantiles, pegatinas y ropa de niños".
El operador también ha presentado una petición para cancelar un registro actual respecto a la marca Google que hace referencia a servicios de correo electrónico y búsqueda.
"Sin duda, estábamos primero en el mercado", señaló Steven Esrig, presidente de Stelor. "Hemos estado intentando llegar a un acuerdo durante casi seis años. Ni siquiera hemos logrado un diálogo", añadió.
No es el primer problema que tiene el popular buscador en relación con su marca. A principios de 2004, por ejemplo, fue Google quien 'invitó' al buscador de contenidos para adultos Booble a retirar el dominio y a dejar de utilizar una imagen casi idéntica a la suya.
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