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Wayland es desde Fedora 32 mi servidor gráfico de referencia. Como ya he dicho en otras ocasiones, paso incontables horas haciendo con él prácticamente de todo: navegación web, redacción con LibreOffice, programación, edición de vídeo, sesiones maratonianas de Amazon Prime Video, edición de imágenes, reproducción continua de música y jugar (sí, incluso a AAA exclusivos de Windows con Proton). Todo lo hago desde Wayland con un resultado bastante satisfactorio, menos la grabación con OBS Studio, que tenía seguir delegando en Xorg por la falta de soporte oficial para Wayland.

Por suerte en OBS Studio 27 se han puesto los cimientos para acabar con el déficit que arrastraba la aplicación en lo que respecta a soportar Wayland, y de hecho, si uno quiere, puede probar fácilmente la actual versión beta de la aplicación mediante Flatpak. Sin embargo, cuando la probé en enero vi que la tasa de imágenes por segundo era muy inconsistente, al menos a la hora de grabar a 60fps.

Dos meses después he decidido volver a darle una oportunidad a la versión beta de OBS Flatpak, y la verdad es que me ha sorprendido para bien la mejora en la calidad de la grabación. Sin embargo, el entusiasmo inicial se convirtió rápidamente en decepción cuando vi que la grabación de la imagen se congelaba cuando el foco se ponía sobre una aplicación a pantalla completa. Lo curioso del asunto es que OBS seguía funcionando correctamente, así que al apartar el foco de la aplicación o al cerrarla todo volvía a la normalidad.

Hace poco que salió Ubuntu 20.04.2 LTS y la oportunidad que presenta es tan buena como cualquier otra para subirse al carro de la que todavía sigue siendo la distribución número uno del escritorio Linux. Con casi un año de rodaje y con otros cuatro de soporte por delante, Focal Fossa está en su momento ideal, así que aprovechamos para seguir publicando guías con las que acondicionar el sistema a nuestros gustos y necesidades.

Las guías de Ubuntu, no obstante, comenzamos a publicarlas en su día e incluyen diversos artículos con los asuntos más básicos dirigidos a quienes llegan de nuevas. Pero siempre se pueden hacer más cosillas y una que suele interesar a muchos es la de personalizar el escritorio, aunque como todos sabemos Ubuntu utiliza GNOME y en cuestión de temas, GNOME es muy suyo. Por eso no conviene salirse demasiado del cerco que con esmero han preparado los desarrolladores de Canonical.

Arch Linux, posiblemente la distribución para usuarios avanzados más popular del espectro GNU/Linux, decidió hace tiempo deshacerse del instalador semigráfico que utilizaba para obligar a realizar el proceso de instalación mediante la consola de comandos.

Si bien es cierto que la instalación de Arch Linux mediante la consola no es de por sí un infierno, hay que reconocer que resulta poco amigable para los novatos. Ante esta situación se puede recurrir a Anarchy Linux, que en esencia es un instalador semigráfico muy similar al utilizado por Arch Linux en el pasado. A pesar de suavizar la curva de dificultad, es importante tener en cuenta que aquí no hay puntero del ratón, sino que se tienen que usar las teclas de cursor, la barra espaciadora y escribir manualmente el tamaño de las particiones y algunos puntos de montaje (en especial la UEFI).

Con el fin de ayudar a los novatos a adentrarse en el muy actualizado y vanilla mundo de Arch Linux, en las últimas dos semanas me he tomado la libertad de publicar en mi canal personal de YouTube dos vídeos sobre cómo instalar Anarchy Linux. Este medio ofrece algunos escritorios preconfigurados, pero Plasma 5 no es uno de ellos, así que el primer vídeo lo dediqué a mostrar los pasos a seguir para tener a disposición dicho entorno de escritorio por defecto.

La última vez que escribí sobre cosas que hacer después de instalar Ubuntu 17.10, no me enfoqué mucho en personalizar GNOME. Es porque ajustar GNOME es un tema extenso y merece un artículo propio. Y aquí estoy con algunos consejos básicos y algunos interesantes de GNOME.

Si bien escribí este artículo centrándome en Ubuntu 17.10, estoy seguro de que la mayoría de estos ajustes son aplicables a cualquier distribución de Linux que utilice el escritorio de GNOME.

Antes de ver cómo personalizar GNOME, primero debe familiarizarte con este entorno de escritorio.
La mayoría de los puntos en esta sección son obvios. Aún los incluí para que te sirvan si eres completamente nuevo en el escritorio de GNOME.