José, para incorporar una librería DLL dentro de una aplicación MFC normal, puedes seguir estos pasos:
1.
Crear u obtener la DLL: Asegúrate de tener la DLL que deseas utilizar. Si estás creando una, asegúrate de exportar las funciones necesarias.
2.
Incluir el archivo de cabecera: En tu proyecto MFC, incluye el archivo de cabecera de la DLL. Esto te permitirá acceder a las funciones que has exportado.
3.
Configurar el proyecto: En las propiedades del proyecto, ve a "Configuración de vinculación" y agrega la DLL a la lista de dependencias. Asegúrate de que la DLL esté en el mismo directorio que tu ejecutable o en una ruta accesible.
4.
Cargar la DLL: Puedes cargar la DLL en tiempo de ejecución utilizando `LoadLibrary` y obtener la dirección de las funciones con `GetProcAddress`.
5.
Llamar a las funciones: Una vez que tengas el puntero a la función, puedes llamarla como lo harías con cualquier otra función.
6.
Liberar la DLL: No olvides liberar la DLL cuando ya no la necesites usando `FreeLibrary`.
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1. Utilizar un desensamblador: Herramientas como Dependency Walker o Visual Studio pueden ayudarte a ver las funciones exportadas por la DLL. Simplemente abre la DLL con estas herramientas y podrás ver una lista de las funciones disponibles.
2. Documentación: Si la DLL es de un tercero, revisa la documentación proporcionada, ya que a menudo incluye una lista de las funciones y su uso.
3. Código de ejemplo: Si tienes acceso al código fuente de la DLL, revisa el archivo de cabecera donde se declaran las funciones exportadas.
Siguiendo estos pasos, podrás incorporar y utilizar DLLs en tus aplicaciones MFC de manera efectiva.
