PDF de programación - Software libre y su utilización en la enseñanza

Software libre y su utilizacin en la enseæanza

Ilusiones de un docente

Incluso en los difciles tiempos que vive la enseæanza, creo que los docentes es-
tamos de acuerdo en cuÆles son las ilusiones que nos han llevado a ejercer esta profe-
sin y nos impulsan cada vez que entramos en un aula: ofrecer nuestro trabajo para
mejorar integralmente a nuestros alumnos, trasmitirles los conocimientos que noso-
tros aprendimos de nuestros maestros, hacerles partcipes de los fundamentos de
nuestra cultura y fomentar en ellos tanto un espritu crtico que les permita afrontar la
vida con independencia como un sentido del trabajo en equipo y la colaboracin para
buscar el bien comœn.

Somos responsables de llevar a las nuevas generaciones el conocimiento adqui-
rido por las anteriores. Tenemos que trasmitir tanto con nuestras palabras como con
nuestros hechos una manera de entender el mundo basada en compartir conocimien-
to, trabajar en equipo, respetar la diversidad y extender estas ideas.
Ideales de la humanidad

Imagino que muchos de vosotros estarØis de acuerdo en que hay dos grandes
ideales extremadamente importantes para la humanidad: el ansia de conocimiento y
la bœsqueda del bien comœn.

El mØtodo cientfico nos ayuda a saciar el ansia de conocimiento, estudiando y
ofreciendo maneras de conocer la realidad con mÆs precisin y profundidad. El mØto-
do cientfico se basa en la posibilidad de repetir las experiencias con fidelidad. Cual-
quier descubrimiento debe ir acompaæado del mØtodo utilizado, tan explicado como
sea posible, para favorecer su reproduccin por otras personas y constatar su validez.
En las disciplinas cientficas mÆs duras y tericas, menos experimentales, como mate-
mÆticas y fsica terica, cada afirmacin debe ir acompaæada de su correspondiente
demostracin, que es la manera de poder entender cmo funcionan las teoras. En las
disciplinas tØcnicas como ingenieras o arquitectura se piden los planos de las crea-
ciones como mØtodo de conocer cmo estÆn ideadas y discutir entre iguales la validez
de los planteamientos.

La bœsqueda del bien comœn nos lleva a desear un reparto equitativo de los bie-
nes materiales, a procurar la felicidad de nuestros congØneres, a desear llevar la edu-
cacin y el conocimiento a todos los seres humanos. TambiØn nos hace tomar deter-
minadas actitudes ante situaciones que nos parecen injustas y nos impulsa a intentar
cambiar aquello que consideramos socialmente malo.
Cmo se crea el software

Conducimos un coche sin necesidad de saber construirlo, vivimos en casas sin
que tengamos que ser arquitectos y usamos los programas en nuestros ordenadores
aunque para ello no haga falta que sepamos crearlos. Pero eso no quiere decir que nos
sea ajeno el conocimiento que necesitan ingenieros, arquitectos o programadores para
cumplir su misin; aunque no conozcamos los detalles de su trabajo, es interesante
tener una somera idea de en quØ consiste.

Para crear un programa es necesario escribir sus instrucciones, explicar al orde-
nador con una exasperante precisin y tediosa longitud todo lo que deseamos que
haga. Esto se llama cdigo fuente de un programa; puede estar escrito en muchos len-

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guajes de programacin, pero en cualquier caso, es comprensible por un tØcnico. A
partir del cdigo fuente, mediante programas que nos ayudan, creamos la versin que
pueden utilizar los usuarios, formada por el cdigo binario. Esta versin ya no puede
ser entendida por un humano (salvo con tØcnicas extremadamente lentas y difciles),
ya que estÆ preparada para que sea utilizada por el ordenador.
QuØ es el software libre

Aunque todo el software se produce como se ha explicado, sus diferentes crea-
dores son los que deciden cmo ha de ser usado y quØ derechos le otorga al usuario.
Las compaæas o individuos particulares que escriben software pueden decidir que el
usuario solo tiene derecho a utilizar la versin binaria a cambio de dinero o que pue-
den hacer sus propias modificaciones en el cdigo fuente. Hay toda una gama de po-
sibilidades que se explicitan en las diferentes licencias que acompaæan a los progra-
mas y que son de obligada lectura cuando se van a instalar en el ordenador.

Llamamos software en propiedad al que otorga al usuario el derecho a utilizar el
programa binario a cambio de una cantidad de dinero. Lo mÆs habitual es que solo se
pueda instalar y utilizar en un ordenador, de modo que si queremos que sea usado en
veinte ordenadores, hay que comprarlo veinte veces. Este tipo de software es el mÆs
conocido por el gran pœblico, ya que sus fabricantes pueden desembolsar grandes
cantidades de dinero en publicidad. Como ejemplos, el sistema operativo Microsoft
Windows y el procesador de textos Microsoft Word. Este tipo de licencias no permite
copiar los programas para que los utilicen otras personas aparte de los compradores;
aun as, esto se hace con bastante frecuencia, pero es una actividad ilegal, penada por
la ley, y desde luego muy cuestionable Øticamente.

El freeware es software que no cuesta ningœn dinero, pero que no permite el ac-
ceso al cdigo fuente; se puede usar gratuitamente en tantos ordenadores como se
desee. Por ejemplo, el navegador Microsoft Internet Explorer. Normalmente los pro-
gramas con esta licencia se pueden copiar a otras personas, aunque no siempre.

El software libre es el que otorga a los usuarios el mÆximo nivel de libertad: los
binarios se pueden usar en tantos ordenadores como se desee, se pueden hacer tantas
copias como se quiera, se puede repartir a quien se desee; pero ademÆs el cdigo
fuente estÆ disponible, se puede examinar para ver cmo estÆ construido, se puede
modificar y tambiØn es posible volver a publicar las modificaciones efectuadas. Por
ejemplo, el sistema operativo GNU/Linux. El software libre no tiene por quØ ser gra-
tuito, puede ser necesario pagar por Øl, pero en la prÆctica, dado el acceso a la infor-
macin que proporciona Internet, resulta efectivamente ser gratis.

Es interesante explicar en quØ consiste el software de fuentes abiertas (Open
Source), aunque no sea una categora de software en virtud de las licencias. Se dice
que un programa es de fuentes abiertas cuando su cdigo fuente es visible al pœblico.
Todo el software libre es de fuentes abiertas, pero no al revØs, porque podra no estar
permitido hacer modificaciones, ni siquiera para uso privado. Con todo, la gran dife-
rencia es filosfica. Cuando hablamos de software de fuentes abiertas nos fijamos en
el hecho tecnolgico de que es posible revisar cmo estÆ hecho el programa; cuando
hablamos de software libre nos parece mÆs importante seæalar el hecho de que el
usuario tiene derechos de modificacin sobre el cdigo.

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QuiØn usa software libre

Existen muchas entidades e individuos que utilizan software libre. Comenz a
usarse en ambientes universitarios y de investigacin, es mayoritario en empresas de
servicios de Internet y, desde hace poco, tambiØn hay centros de enseæanza y centros
pœblicos que disponen de software libre en sus ordenadores de mesa.

El buscador de Internet Google utiliza exclusivamente el sistema operativo
GNU/Linux en sus mÆs de diez mil ordenadores. La empresa de venta de libros y dis-
cos por Internet Amazon tambiØn usa GNU/Linux. Industrial Light & Magic, la em-
presa que cre los efectos especiales de La Guerra de las Galaxias, usa GNU/Linux
tanto para los intensos cÆlculos matemÆticos necesarios para crear los efectos como en
los ordenadores de los diseæadores; muchas otras empresas de efectos especiales se
han pasado a GNU/Linux. El CNICE, que aloja las pÆginas web oficiales de todos los
centros de enseæanza no universitaria de la Comunidad de Madrid y da correo a los
docentes que lo solicitan, utiliza exclusivamente software libre. En la Comunidad de
Extremadura se ha decidido que todos los alumnos pasen a utilizar software libre, lo
que estÆ permitiendo llegar a ofrecer un ordenador para cada dos alumnos en todas
las aulas. La Comunidad de Madrid ha instalado software libre en todos los nuevos
ordenadores de los IES.
Cmo enseæar

Antes de pasar a reflexionar sobre el uso de software libre en las aulas, debera-
mos hacerlo sobre el modo en que debemos enseæar las diferentes disciplinas, espe-
cialmente las relacionadas con la informÆtica.

¿Debemos enseæar a sumar o mostrar cuÆl es el botn de sumar de una calcula-
dora? ¿Debemos explicar las frmulas finales que permiten calcular algo o hay que
explicar el proceso por el que se obtienen los resultados? ¿Ofrecemos a nuestros
alumnos una lista de autores y obras literarias o les pedimos que reflexionen sobre su
significado? ¿Les explicamos lo difcil que es para la naturaleza degradar los plÆsticos
o les decimos solo que las bolsas van al contenedor amarillo? En definitiva, ¿explic-
amos los fundamentos de las materias para que nuestros alumnos puedan comprender
los conceptos y formar su propio juicio o bien les mostramos directamente las conclu-
siones prÆcticas?

En mi opinin, la enseæanza de las herramientas informÆticas debera concen-
trarse en comprender los conceptos bÆsicos, que son muchos, importantes y no siem-
pre obvios; no debera consistir en explicar los colores de los botoncitos de las aplica-
ciones. Conocido en quØ consiste el proceso de textos, se podrÆ usar cualquier proce-
sador; si se enseæan las particularidades de uno solo, en cuanto se cambie aunque sea
œnicamente la versin, habrÆ que volverlo a explicar. Cuando se enseæa a conducir un
coche, se hace de mo